Como venía siendo habitual a lo largo de toda la temporada a esta prueba solo asistimos Curro y yo. Tras la llegada a Lora y nuestro correspondiente desayuno nos preparamos para disputar dicha carrera en la que teníamos que realizar un buen papel ya que pasaba por nuestro pueblo y tocaba lucirse en la medida de lo posible.
Tras la salida tomamos dirección La Puebla donde esperaba el primer repecho camino del embalse José Torán y tras él como el año anterior apareció la lluvia hasta la llegada a La Puebla, allí una pequeña parada, un refresquito, nos agrupamos y empezamos el tramo libre: mariquita el último; nos esperaba un duro recorrido de 24 kilómetros con fuertes subidas y peligrosas bajadas con la carretera bastante peligrosa por la lluvia, al principio me lo tomé con calma, tenía la referencia del año anterior (57 minutos) pero pasaron los kilómetros y me sentía cómodo yendo a buen ritmo, de la cuesta Los Chinos ni me enteré se me hizo muy corta porque íbamos un grupo numeroso y ya con la proximidad del pueblo eché el resto para entrar en meta situada en la plaza con un tiempo de 51´41´´ (5 minutos menos que el año anterior).
Una vez allí a reponer fuerzas y a esperar a mi compañero que entró en meta con un tiempo de 1 hora 3 minutos (2 minutos menos que el año anterior).
Después del esfuerzo del tramo libre nos quedaba lo peor ya que este año esta marcha teniía la novedad de que el recorrido transcurría hasta el cruce de San Nicolás para una vez allí girar hacia Constantina por lo que todavía nos quedaba más de la mitad de la carrera pero ahí fuimos ya más tranquilos poquito a poco aunque en los llanos se rodó rápido y ya no nos volvimos a agrupar hasta Constantina donde había otra avituallamiento líquido y tras una corta parada ya nos quedaba lo más fácil regresar a Lora del Río.
Una vez allí nos jartamos de comer como siempre, presenciamos la entrega de trofeos y demás, felicitamos a Manuel Cascales por la organización de la Marcha y de regreso al pueblo.
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